Hombre y Mujer Leo, ¿Peligroso estar con alguien del mismo signo?

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El equipo Tu astrólogaTu astróloga
19 Noviembre 2023
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Una combinación romántica entre dos personas del mismo signo puede ir muy bien o mal, dependiendo del signo en cuestión. El principal problema suele ser la gran cantidad de emociones similares que se desarrollan. Cuando dos personas son tan semejantes, pueden llegar a chocar o repelerse. En el caso de Leo, cuya personalidad es prepotente y dominante, nos encontramos con dos personas que desean ser el centro de atención o llevar la batuta en todo lo que se proponen.

Su inclinación a ser el centro de todas las miradas hace que los conflictos entre ellos sean frecuentes. Pero no porque sea algo que interfiere en sus deseos, sino por orgullo. Lo mejor para que se desarrolle una convivencia sana entre ellos es que cada uno lleve su propia vida profesional o social, en paralelo a su unión, para que sus ideas o logros no choquen.

El hombre Leo en una relación

El hombre Leo está acostumbrado a ser el centro de atención en todo momento. Esto no resulta complicado para él, no necesita hacer ningún esfuerzo para que suceda, ya que se produce de manera natural. Por otro lado, no se trata de una película que se haya creado en su mente. Al contrario, es un hecho que la gente disfruta mucho de su presencia, tanto como él compartiendo esos momentos. Un hombre Leo podría comportarse de forma descarada y, a pesar de todo, salir beneficiado. La gente no se sentirá molesta, porque está impactada con su carisma.

Pero lo mejor de todo es que el  hombre Leo desea que los demás estén tan bien como él, así que se esfuerza porque la gente que se muestra amable con él se sienta a gusto. Asimismo, es un hombre fiel, que busca la estabilidad en las relaciones con sus amigos más cercanos, su pareja y su familia, a la cual protegerá por encima de todo. Será un gran confidente.

La Leo en pareja

De la misma manera, la mujer Leo llama la atención allí donde va, sólo que ella usa sus poderes de manera diferente. Además, es un poco más relajada que su versión masculina. Ella se siente más libre para explorar, por eso acepta mucho mejor los cambios. En general, es muy parecida al hombre de su mismo sigo, pero en versión más ligera.

Cuando se desenvuelve en la sociedad, ambos presentan la misma capacidad de comerse el mundo. Ella también es firme en sus decisiones y su palabra vale mucho. Como está tan segura de sí misma, no pierde el tiempo preocupándose por lo que puedan pensar los demás. Es feliz siendo como es y guarda una gran fidelidad a sus allegados, como amigos o familiares. Devolverá con creces todo lo que le han dado y apoyará a quienes le hayan servido de apoyo.

Principales obstáculos que marcan el inicio de la relación

Es difícil que se acerquen si pertenecen a un mismo círculo de personas,ya que siempre existirá una competitividad latente entre ambos. Esto hace que se vean como rivales y aleja la posibilidad de establecer una buena amistad. Además, siempre habrá un pequeño grupo de personas que estarán a favor de cada uno de ellos, alimentando su ego. Estarán tan centrados en sus cosas, que será difícil que alguno de ellos dé el primer paso hacia la tregua, favoreciendo el comienzo de la relación.

Realmente, ambos reconocen las habilidades del otro, pero eso es precisamente lo que provoca la falta de comunicación entre ellos. Pensarán constantemente en lo bueno que puede ser el otro y estarán atentos a cada uno de sus movimientos. Para que se establezca un primer encuentro entre ellos, necesitan un mediador que les presente. En este caso, tendrán que dejar todos sus temores a un lado, para poder conocerse de verdad.

La importancia del sexo para estos dos signos

La sexualidad será uno de esos momentos en los que pueden sentirse relajados y dejar sus diferencias a un lado. Para ambos Leo se trata de un ritual importante que debe formar parte de su rutina. Disfrutan y se divierten mucho con el sexo. A los dos les gusta explorar y probar nuevas aventuras, así que no hay lugar aquí para el aburrimiento.

El extraño caso de un matrimonio feliz

Si dos Leo piensan en casarse, quiere decir que han logrado aceptar sus diferencias, es decir, que han superado la etapa más difícil de su relación y están seguros de su decisión. Es importante tener esto en cuenta, porque tienen muy pocas probabilidades de establecer una relación duradera. Por lo general, ni siquiera es probable que lleguen a ser pareja, debido a sus continuas peleas por asumir el liderazgo. Así que, si han llegado hasta este punto, será porque han logrado comunicarse muy bien, estableciendo sus límites y llegando a acuerdos importantes.

Otro punto a favor de ambos es que los dos tienen las mismas ganas de que todo sea un éxito, especialmente cuando buscan de formar una familia. Los Leo suelen entregarse completamente a su círculo familiar, así que les hace ilusión saber que están formando el suyo y se esfuerzan mucho porque todo salga bien.

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Cuando esta pareja decide tener hijos

Como padres, siempre tendrán tiempo para la diversión y sus hijos crecerán viviendo grandes experiencias, porque a ambos les gusta llenar su vida de grandes momentos. Aun así, tienen harán gala de su carácter a la hora de educarles y esperan que sus hijos sean siempre los mejores en todo lo que hacen, por lo que ejercerán mucha presión sobre ellos. Además, discutirán frecuentemente por ver quien se ocupa mejor de ellos o por asegurarse de que sus hijos les prefieren a ellos y no a su pareja. Pero únicamente caerán en este error cuando tienen problemas y necesitan echarse alguna cosa en cara.

Principales obstáculos trabajando en equipo

Trabajar juntos no será una tarea sencilla, ya que sacarán sus garras a relucir con bastante frecuencia, creando grandes conflictos sobre quién es el más capacitado para asumir cualquier tarea. Competirán para ser el centro de atención o para tener más poder que el otro. Los conflictos estallarán por estas y por muchas otras razones, así que la convivencia entre ellos será prácticamente imposible.

Su problema es que tienen una manera única de hacer las cosas, la misma que han asumido por decisión propia y que siempre les ha funcionado. Así que cuando sus opiniones no coinciden o sienten que la otra persona está en su contra, no saben cómo actuar. Pasa lo mismo cuando los planes no salen como ellos esperaban. La única posibilidad de que coincidan en algo es que ambos tengan el mismo objetivo o que su plan sea similar.

Los infinitos motivos de peleas entre ellos y cómo pueden aprender a gestionarlos

Sus principales peleas son debidas a su tendencia a tomar el control de las cosas y se producirán desde el comienzo de la relación, sea amistosa o amorosa. Si estas discusiones son muy recurrentes, ni siquiera llegarán a establecer una relación seria. Para que tengan alguna posibilidad de llevarse bien, tendrán que tener intereses muy distantes y actividades diferentes, que les permitan abrir un espacio entre ellos y que no les impulse a discutir.

Si sus gustos concuerdan, cada uno deberá buscar un espacio que pueda dominar a su antojo. A partir de allí, todo marchará bien, ya que cada uno se centrará en lo que le corresponde y vivirá feliz en su rutina.

Concluyendo. A esta pareja se le presenta una unión complicada desde el principio. A los dos les gusta hacerse notar y asumir el liderazgo, así que el choque entre ellos es inevitable. Para que la relación entre ellos fluya adecuadamente, es importante que tengan actividades y gustos diferentes, donde no tengan que competir el uno con el otro. Tan sólo así podrán establecer una convivencia sana y agradable.

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